“La labor de la justicia debe continuar para que todos los autores y coautores de este crimen sean identificados y rindan cuentas de sus actos”, fue el llamado de Joseph en su cuenta de Twitter.
Se recuerda, además, que el primer ministro, Ariel Henry (quien asumió el poder de Haití tras la renuncia voluntaria de Claude Joseph), hace varias semanas destituyó al fiscal que lo solicitó a un juez que lo investigara por su supuesta vinculación con el magnicidio.
La Fiscalía haitiana procedió a solicitar a una empresa de telecomunicaciones los registros de las llamadas telefónicas, las cuales, más tarde, revelaron que sí estuvo en contacto con Joseph Badio, el principal prófugo de la justicia a quien ligan al asesinato de Jovenel Moise.
Más adelante, en su intervención en la más reciente Asamblea General de las Naciones Unidas, Henry pidió ayuda a la comunidad internacional y a esa entidad para que se logre identificar a los responsables del crimen.
Mientras, el primer ministro se mantiene en diferentes reuniones con algunos partidos políticos y sociedad civil en busca de un consenso para las próximas elecciones generales, en momentos cuando Haití se apresta gradualmente y por sectores al reinicio de la docencia.
