Una niña de EE.UU. se recupera tras una cirugía pionera en Rusia que eliminó una enorme marca de nacimiento de su rostro

Luna Tavares-Fenner, una niña de EE.UU. de apenas dos años y nueve meses, está en proceso de recuperación tras haber pasado casi toda su vida bajo tratamiento para erradicar la enorme mancha negra que le cubría el rostro desde su nacimiento.

Esta condición se denomina nevus melanocítico congénito, y es una afección de la piel que produce manchas anormalmente oscuras, por lo general en la cara.

Luna fue operada seis veces en una clínica de Krasnodar, luego de que el doctor Pável Popov leyera sobre el caso en un periódico ruso y le escribiera a su madre para invitarla a dicha ciudad del sur de Rusia, donde la niña podría recibir un tratamiento pionero en el mundo y que no está disponible en EE.UU. 

Por otro lado, un donante ruso anónimo pagó por una parte importante del tratamiento. La familia de Luna lo califica de «milagro».