Miguel Cruz Tejada
NUEVA YORK._ El juez Thomas Dreschler de la Corte Superior de Salem en Massachusetts impuso ayer martes una leve condena de entre siete y medios a ocho años de cárcel al conductor Deybet Blanco quien el 2 de marzo 2016 chocó el vehículo que conducía la dominicana Oscaris Pimentel, la novia del destacado corredor de campo y pista Julio Berroa, de 24 años de edad a quien dejó parapléjico de por vida y a la mujer grave.
Berroa, era considerado la súper estrella deportiva de la escuela secundaria de Lawrence (Massachusetts) donde se crió después de llegar en 2008 desde la República Dominicana a Estados Unidos.
Blanco, tronchó su brillante carrera para siempre. Berroa también jugaba béisbol y baloncesto aunque se decidió por correr en las pistas.
Ha tenido que ser sometido a 10 cirugías, una cada año, desde la fecha del accidente, necesitando cuidados en el hogar para poder comer, moverse y no puede bañarse y hacer otras necesidades por sí solo.
La mujer sobrevivió milagrosamente al impacto y debió permanecer semanas en el hospital para recuperarse aunque se mantuvo estable.
El juez descontó los más de 5 años que Blanco ha estado en prisión y le prohibió de por vida volver a conducir un vehículo.
En una negociación con los fiscales, Blanco de 39 años de edad se declaró culpable por de 39 años, por cargos de operación negligente y asalto y agresión con un arma peligrosa causando lesiones corporales graves.
“Tenía el Diablo adentro”, les dijo Blanco a los policías el día del accidente. Manejaba su camioneta Pickup cuando chocó frontalmente a Berroa y su novia.
El juez describió al sentenciado como profundamente enfermo mental y le ordenó someterse a una evaluación psicológica y tomar medicamentos recetados según las prescripciones médicas.
El proceso fue presencial en el que el juez le preguntó varias veces a Blanco si entendía la causa judicial a lo que respondió que si varias veces.
El tribunal le dio crédito por 2,121 días que ya estuvo en la cárcel o en custodia, los cinco años y casi nueve meses desde el accidente del 2 de marzo de 2016.
Durante los últimos cinco años, la capacidad mental de Blanco para ser juzgado era inestable y permaneció detenido sin derecho a fianza, retrasándose el debido proceso.
Berroa, ahora de 24 años, sufrió una devastadora lesión en la cabeza que le provocó una parálisis que requiere que lo atiendan las 24 horas.
El fiscal adjunto James Gubitose conmovió a la corte reseñando la brillante carrera atlética de Berroa y resaltando el daño permanente.
La policía dice que Blanco estaba en una misión suicida en la fecha del accidente cuando chocó de frente su camioneta contra el sedán del atleta en la calle Howard en Lawrence.
El choque ocurrió del cuartel 6 de los bomberos de Lawrence y un veterano describió el incidente como una de las peores cosas que había visto en su carrera.
Los bomberos utilizaron dos juegos de herramientas de extracción de Tiburón de la vida para liberar a los adolescentes de los restos destrozados del Honda.
Inmediatamente después del accidente, «Nadie se merecía lo que pasamos», dijo Pimentel en una conferencia antes de la sentencia a Blanco.
Añadió que ella y Berroa tenían toda la vida por delante cuando ocurrió el accidente.
El Ministerio Público pidió una condena de 15 años para Blanco y otros 5 en libertad condicional.
El acuerdo de Blanco con la fiscalía establece que él no enfrentaría cargos adicionales como el de homicidio si Berroa muere a resulta de las lesiones sufridas en el accidente.
En 2014 y 2015, Berroa rompió el récord escolar de campo y pista de los 4×400 y el salto de longitud 21-5 ganando el campeonato MVC (División 2) tres temporadas seguidas (primavera de 2014, primavera de 2015, invierno de 2015)».
«Vine de la República Dominicana a Lawrence en 2008. Estoy orgulloso de venir de Lawrence. Me gusta aquí. Me gusta la gente. Me gusta la escuela. Lo disfruto aquí. Fue genial venir aquí», le dijo al atleta al periódico local de Lawrence Eagle Tribune en una entrevista en 2014.