Miguel Cruz Tejada
NUEVA YORK._ Los órganos vitales del policía dominicano Wilbert Mora asesinado el viernes 21 de enero en un apartamento de Harlem junto a su compañero Jason Rivera (también dominicano) salvarán cinco vidas después que fueran donados en un testamento escrito del oficial de 27 años edad y refrendado por su familia.
Su corazón ya fue trasplantando a un recipiente mientras se preparan los funerales que se realizarán el 2 de febrero en la catedral de San Patricio en Manhattan.
Los beneficiarios de los órganos de Mora no han sido identificados por respeto a la privacidad, pero se confirmó anoche que entre ellos hay un familiar del agente.
El corazón, los riñones, el páncreas y el hígado donados por Mora fueron se trasplantaron a tres recipientes en Nueva York y los otros dos en otros estados de Estados Unidos.
El oficial nacido y criado en el Alto Manhattan y de padres migrantes dominicanos murió el martes en el Centro Médico Langone de la Universidad de Nueva York donde se extrajeron sus órganos después de ser trasladado a ese nosocomio desde el hospital Harlem.
Pero debido a que era donante de órganos, después de muerto, Mora podrá salvar cinco vidas, confirmó ayer miércoles según el presidente (CEO) de la Red de Donación y Trasplante de Órganos de Nueva York.
El corazón, los riñones, el páncreas y el hígado donados por Mora, de 27 años, luego se destinaron a tres beneficiarios en su estado natal de Nueva York y a dos más en otras partes del país, dijo Leonard Achan, director ejecutivo de la organización “Live On NY”, que ayudó a facilitar que se cumpliera el último deseo en vida de Mora.
“Alguien recibió el corazón de este héroe”, dijo Achan a la cadena Fox News.
«El oficial Mora y su familia son grandes, grandes partidarios de la donación de órganos, y esto era importante para ellos y querían asegurarse de que él viviera. Querían asegurarse de que sabían que él era un héroe en la vida, y que él seguiría siéndolo en su desafortunada y trágica muerte», señaló Achan.
Mora, murió el martes de esta semana de las heridas sufridas el viernes que lo dejaron en coma con un bala en su cerebro y no pudo despertar jamás
El asesino de los dos policías, criminal de carrera afroamericano, Lashawn McNeil murió también en coma con horas de diferencia a la muerte de Mora.
Achan se negó a entrar en detalles sobre los recipientes de los órganos del oficial, citando el derecho a la privacidad de los pacientes, pero dijo que cada uno de los beneficiarios tendrá una nueva oportunidad de vida gracias a Mora, la policía de Nueva York, los paramédicos, los trabajadores del hospital y otros involucrados.
Explicó que cuando muere un donante de órganos, es una carrera para conseguir partes del cuerpo que salvan vidas para los posibles receptores.
Deben mantenerse en un respirador mecánico y los órganos deben estar intactos después de cualquier trauma que haya matado al donante.
“En un escenario perfecto, un solo donante puede suministrar órganos a ocho personas”, dijo Achan. “Y con la donación de tejidos se puede cambiar la vida de hasta 50 personas”.
Eso incluiría piel, válvulas cardíacas, trasplantes de córnea y tejido, explicó.
Los residentes, familiares y oficiales de policía dicen que la pérdida de estos dos oficiales los ha sacudido hasta la médula. Muchos policías dicen que una gran fuente de esperanza proviene del abrumador apoyo de la comunidad.
«Colocar flores, inclinar la cabeza, alimentar a nuestras familias, cuidar a nuestros policías, no solo aquí en este lugar, sino en todos los lugares donde los veas. Eso es importante. Los policías de la ciudad de Nueva York viven aquí, trabajan aquí. Son sus hermanas, madres y padres», dijo el presidente de la Asociación Benevolente de la Policía, Patrick Lynch.
Achan dice que espera que la heroica decisión de Mora lleve a otros a firmar como donantes.